Tras el confinamiento por la pandemia de Covid-19, el tiempo cambió. También el espacio: Las nociones de adentro y afuera, de refugio o espacio libre, quedaron trastocadas, lo mismo que la sensación de lejanía o cercanía temporal. Lo que sucedió antes de la pandemia parece, para muchos, más lejano; los días intermedios en el encierro, pueden incluso parecer borrosos.
Esta modificación de las coordenadas que dan dimensión a la experiencia humana atraviesa la curaduría del Festival Poesía en Voz Alta (PVA), encuentro emblemático de Casa del Lago que, tras dos años de realizarse de manera virtual, se llevará a cabo de nuevo en formato presencial, del 11 al 13 de noviembre de 2022. En el cuerpo se hace el tiempo es el título que estructura esta edición.
“El tiempo se nos ha desbordado, o desdibujado”, señala la directora de Casa del Lago, Cinthya García Leyva, para quien en la diversidad de experiencias, pérdidas y reajustes de vida que conllevó el azote de la Covid-19 a nivel global, hay una constante: “el tiempo se nos hizo otro”.
“Es un efecto generalizado que el tiempo se nos revolvió de manera muy extraña. Esas percepciones más o menos normalizadas de lo que significa el presente se modificaron. Queremos ver qué puede hacer la palabra en voz alta con ello”, comparte.
Este año, el festival mantiene una continuidad con las líneas curatoriales de 2020 y 2021, realizados en formato virtual, que llevaron por título La lengua que vibra antes de la palabra y Recuperar desde la voz, explica García Leyva.
“En el marco de la situación de la pandemia y el confinamiento, quisimos empujar las posibilidades de la palabra más allá de lo que puede ser escrito o dicho: cuando lo que puede decir es el gesto o la voluntad de decir”, abunda. Esta visión involucra también al cuerpo como instrumento de la palabra y el discurso.
Así en esta edición, la palabra visual, impresa, en instalaciones, se encuentra con actos sonoros en los que la voz y el signo, también en su forma musical, despliegan formas de reflexionar sobre la temporalidad, en una diversidad de actos. También habrá diálogos y talleres.
Este año, PVA presenta más de una decena de propuestas de artistas provenientes de México y del extranjero. El programa conjunta dos curadurías: por una parte, la de Casa del Lago, que explica García Leyva, hilvana actos sonoros con un eje experimental muy marcado.
“Buscamos actos que fueran novedosos para el público de México, de la UNAM, de los estudiantes y del Bosque de Chapultepec, en los que el tema del tiempo estuviese muy presente en las trayectorias de los artistas”.
Destaca, a decir de la directora, la presencia de Sarah Davachi, reconocida artista canadiense cuyas composiciones electrónicas, de largo aliento, reparan en la duración. “Son muy contemplativas. Ella también trabaja con piezas históricas para recontextualizarlas en el presente, con sintetizadores u órganos; lleva la pregunta por el tiempo desde el sonido”, explica la gestora cultural.
Es también destacable la actuación del artista italiano Abul Mogard. “Me atrevería a decir que es una de las figuras más relevantes de la música electrónica experimental”, observa. “Realiza experiencias complejas que generan efectos en los escuchas”. Después de trabajar la mayor parte de su vida en una fábrica serbia, empezó a hacer música, ya jubilado, como una forma de reconstruir ambientes físicos y afectivos. Su paleta sonora es creada por sintetizadores, órganos Farfisa y otros dispositivos, algunos de ellos construidos por él mismo. Presentará un set vivo con la artista visual Marja de Sanctis.
De México destaca el Coro Acardenchado. Participan también Concepción Huerta (MX) y Milena Pafundi (AR/MX); Efraín Rozas (PE); Aki Inomata (JP), Lechedevirgen Trimegisto (MX), Esther Rodríguez-Barbero (ES), Verónica Valerio (MX), Lorena Salcedo (MX), así como Elisa Schmelkes y el No Coro (MX).
Otra línea curatorial está a cargo de la escritora chiapaneca Clyo Mendoza, quien ha curado los actos poéticos que versarán sobre las nociones del tiempo renovado o confundido, dice García Leyva, con una apuesta de exploración desde las lenguas originarias o la diversidad de género y de identidades corporales, con artistas y poetas provenientes de Ciudad de México, Roma, Oaxaca, Lima, Quebec y Mérida, entre otras ciudades.
“Es una curaduría bellísima que da otra capa política a estas preguntas, pues se va directo al cuerpo, a partir de actos poéticos”.
En este reglón participan artistas como Johan Mijail, poeta trans de República Dominicana, quien se pregunta por la palabra y el conjuro. “Es un acto que esperamos”, comenta García Leyva. También de República Dominicana estará Yaissa Jiménez, con un acto que parte del rap y el slam poetry; la artista hip-hopera mexicana La Cuervo y el grupo mixe Kujipy, que inaugura el festival.
El programa completo puede consultarse en el sitio web casadellago.unam.mx/pva2022.
María Eugenia Sevilla
El Festival Poesía en Voz Alta se realizará del 11 al 13 de noviembre en Casa del Lago. Más información en cultura.unam.mx.