Con la más reciente edición de la Convocatoria del Pabellón Eco, del Museo Experimental El Eco, se reanuda un concurso iniciado en 2010 que consiste en una intervención temporal a la arquitectura emocional desarrollada por Mathias Goeritz en este recinto universitario ubicado en la calle de Sullivan.
En esta ocasión, la curadora invitada para el proyecto es la arquitecta Gabriela Carrillo, una profesionista con amplia experiencia en su campo y quien tiene en su haber múltiples reconocimientos, como el Premio Internacional Mujeres en la Arquitectura 2017 y la Medalla de Plata en la XIII Bienal de Arquitectura Mexicana en 2014.
En entrevista, la también académica de la Facultad de Arquitectura de la UNAM explicó que este concurso, cuya convocatoria está vigente hasta el 30 de noviembre, es uno de los referentes más importantes de la disciplina en México. “Históricamente ha sido una pieza de gestión importante para promover el trabajo de oficinas de arquitectos en el país que no cuentan con una larga trayectoria. Se busca que la propuesta seleccionada intervenga el patio del fantástico Museo Experimental El Eco con alguna pieza o acción arquitectónica, y esta es la primera vez que se invita a un ejercicio interdisciplinario en el que exista un liderazgo de la figura de un arquitecto o arquitecta”.
Para el Pabellón 2023 Gabriela Carrillo busca separarse un poco de las curadurías anteriores y enfocarse en la diversidad que puedan aportar las propuestas preseleccionadas, además de que expongan cómo interpretan el valor del tiempo, en el entendido de que la arquitectura es una cuarta dimensión, un valor del espacio y su relación con el tiempo y con el habitante que lo transcurre.
Recordó que el Pabellón se mantuvo en puntos suspensivos durante la pandemia, un tiempo cero que significó un cambio en el ritmo de nuestra vida, de ahí que hoy sea urgente preguntarse cuáles son los valores del tiempo en la actualidad, después de estar encerrados durante casi dos años. Un cuestionamiento que se extiende, dijo, “a las formas con las que hemos actuado, a la manera en que hemos interpretado lo que significa construir, habitar el planeta y transformar el espacio a partir de materiales que le dan forma a la atmósfera y a un lugar en concreto”.
Carrillo propone como eje para los proyectos concursantes una reflexión sobre el tiempo, el antropoceno y la resistencia tangencial precisamente con el título de Tiempo Cero.
La curadora reflexiona sobre este nuevo capítulo de intervención en el museo: “Estos pabellones efímeros permiten llevar la conceptualización a un nivel muy interesante y traducirlos espacialmente. Ahora, gracias a la interdisciplina el punto de vista se complejiza. El sumar voces con diferentes miradas puede arrojar resultados muy diferentes. Cada vez más hay mayor diversidad y cada vez menos tenemos el ojo puesto en la figura de un solo individuo, persiste una voz colaborativa que enriquece los resultados. Las nuevas generaciones arropan una variedad de actores, lo que es muy revelador en nuestras prácticas como arquitectos y arquitectas. La visión inclusiva de distintos grupos nos hace entender que somos una comunidad diversa en la que existe una complejidad deliciosa”.
Desde su perspectiva, la arquitectura es arte espacial y no solamente visual. “Es la construcción de una atmósfera y de una emoción”. Para ella, la arquitectura mexicana siempre ha tenido un papel relevante a nivel internacional. “Actualmente se hacen cosas increíbles, intervenciones espaciales en distintas partes del país, reconociendo simultáneamente nuestra diversidad ecológica y paisajística”.
Agregó que se pretende que el Pabellón Eco 2023 sea un espacio no solo provocador, sino que también ponga sobre la mesa preguntas respecto a las formas de habitar que no se han planteado. “Nos interesa que cada una de las oficinas seleccionadas aporte a la reflexión, que sea ésta una experiencia que nos abra interrogantes y nos permita volver a conectarnos, y de paso valorar cómo la condición presencial es apremiante y necesaria para nuestra sociedad”.
El proceso de selección de los portafolios estará a cargo del museo, la curadora y un especialista invitado. Los cinco equipos de trabajo que se seleccionen entre los inscritos se darán a conocer el 9 de diciembre de 2022 y recibirán las bases detalladas para la realización de una propuesta concursante, misma que se evaluará en una mesa de jurado en febrero de 2023. El Pabellón Eco 2023 se abrirá al público en el mes de mayo.
Gabriela Carrillo ha sido reconocida por el Emerging Voices Award, la Cátedra Federico Mariscal, la Medallie d’OR de la Academia de Arquitectura Francesa, el título de Arquitecta del Año por la Architectural Review en Londres, Arquitecta del Año por Architectural Digest México y el Premio Obras Cemex. Desde 2019 es Miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte y académica de número por la Academia de Arquitectura de México a partir de 2021.
La convocatoria y el enlace para el registro pueden encontrarse en la página: eleco.unam.mx.
René Chargoy Guajardo