Lo que sucede en la Tierra: La gran catástrofe del oxígeno

El holograma de un gigantesco hielo que se derrite te sumerge al oscuro recinto. Imposible volver la vista. Ahí está. Exige ser observado. Memorizado. Reflexionado. Es el planeta Tierra al circunnavegar el sistema solar. Un ecosistema rico y diverso que se funde en el cosmos sin que a nadie le importe; porque si nosotros vivimos en él y no nos importa, ¿a quién sí? Inconcebible pensar en alienígenas o seres celestiales. Es nuestro hogar y es nuestra responsabilidad conservarlo. De nadie más.

Fotosíntesis: La gran catástrofe del oxígeno reclama respuestas a preguntas incómodas. El capitalismo exacerbado de la actualidad ha desecho lo que la naturaleza ha forjado a lo largo de millones de años. Ya se presentan extinciones masivas que son resultado inequívoco de una actividad industrial desenfrenada. Analogía que se presenta irónicamente en la forma de un insecto de oro postrado bocarriba en un estante de la muestra. Porque aparentemente es todo lo que interesa al empresario: modificar el ambiente del mundo; estudiarlo; someterlo; poseerlo.

Un sinfín de esculturas de animales arcaicos. Lienzos salpicados de clorofila. Plantas en balones y embudos de separación: experimento químico en funcionamiento. Gritos inaudibles. Rugidos insonoros. Fotosíntesis: La gran catástrofe del oxígeno está aquí y ahora. Eduardo Abaroa, creador de la exposición, hila con aparente contradicción la congoja que sienten todos los que “sí ven” lo que sucede en la Tierra. ¿Serán hippies?, ¿filósofos, biólogos o artistas desempleados?, ¿ecoterroristas envilecidos? No. Únicamente seres humanos angustiados, como deberíamos estar todos si queremos conservar nuestro planeta.

Mauricio Maldonado

Fotosíntesis: La gran catástrofe del oxígeno se expone en Casa del Lago hasta el 20 de septiembre. Consulta los horarios de visita www.cultura.unam.mx.