Exhibe Casa del Lago carteles de movimientos indígenas y sociales

Casa del Lago y la Cátedra Nelson Mandela de Derechos Humanos en las Artes presentan la exposición ​Un mundo donde quepan muchos mundos. Una lucha donde quepan muchas luchas, hasta el 4 de octubre en las rejas del centro cultural ubicado en Chapultepec. La muestra está conformada por 21 carteles de los artistas urbanos Gran OM (Omar Inzunza) & Co (Kloer), en la que ambos reflejan movimientos y protestas sociales como la Ley Revolucionaria de las Mujeres de Zapatistas, los principios del EZLN y la oposición de grupos indígenas a la construcción del Tren Maya.

Exposición Un mundo donde quepan muchos mundos. Una lucha donde quepan muchas luchas. Casa del Lago

Cada uno de los carteles en gran formato visualiza las exigencias y sueños de los pueblos originarios de México, mismos que buscan alternativas de convivencia comunitaria fuera de la lógica capitalista de explotación y despojo. Desde la mirada de María de Jesús Patricio Martínez, Marichuy, defensora de los derechos humanos de origen nahua y personaje central de uno de los carteles, “Gran OM ha sabido construir una narrativa gráfica y visual potente de las luchas indígenas”.

Gran OM & Co surge como estudio en 2006, en medio de las protestas y movilizaciones por la represión del gobierno del Estado de México, encabezado entonces por Enrique Peña Nieto, en contra de pobladores de San Salvador Atenco y en un contexto electoral convulsionado. Cuatro años después, el estudio empieza a producir gráfica para apoyar los movimientos políticos al igual que a artistas independientes vinculados al rap y el reggae.

 

Particularmente Gran OM también se ocupa de crear carteles para promocionar conciertos, películas y obras de teatro, lo que complementa con el diseño de portadas de discos. En 2016 se sumó al proyecto Kloer, un grafitero y destacado dibujante, quien vendría a afinar la estética de todo este trabajo que se propone integrar de manera central la temática de las luchas sociales.

Ambos jóvenes artistas utilizan la ilustración, el muralismo, el grafiti, incluso el documental y el videoclip, como las formas de expresión que les permiten dar salida a su arte, el cual emerge de una labor multidisciplinaria.

Respecto a esta exposición, se pensó que era una buena oportunidad reunir algunos de sus grabados impresos previamente como carteles, y que son testimonio del acompañamiento de Gran OM y Kloer a las luchas del EZLN, del Congreso Nacional Indígena (CNI) y del Concejo Indígena de Gobierno (CIG). Fue así que propusieron para esta ocasión una serie de gráficos hechos ex profeso para apoyar a las comunidades indígenas del sureste de México.

Omar Inzunza comenta: “Cuando se abrió la posibilidad de conjuntar material gráfico en torno al zapatismo inmediatamente dijimos que sí, pues nos interesa visibilizar estos movimientos para que sigan más vivos que nunca. Esta exposición es también una muestra del enorme cariño que le tenemos al zapatismo, al que le debemos bastante y reconocemos nuestra formación como personas”.

“Me genera mucha curiosidad”, dice Omar en entrevista telefónica, “el que haya tanta gente talentosa en las calles y que muy poco de ese talento se dirija a apoyar los movimientos sociales. Contamos con una gran cantidad de artistas, colegas e ilustradores, pero en general no se preocupan por adquirir un compromiso social, lo que obliga a los distintos participantes en las luchas comunitarias a ser autodidactas y resolver austeramente sus necesidades de propaganda para sus movimientos. Por nuestra parte podemos decirles que no se sientan solos, queremos que sepan que no faltará quienes nos manifestemos solidariamente con ellos, lo que seguramente les hará sentirse escuchados, y es así que podremos generar un espíritu de comunidad a distancia”.

 

El proyecto de Gran Om y Kloer tiene un principio de valores, no son grafiteros, ilustradores o diseñadores, se consideran artistas sociales y políticos. Les mueve el dolor ajeno, son empáticos con los más vulnerables, los jodidos de siempre. Le dan valor a las luchas de otras personas y creen que es posible construir un mundo distinto, y para tal fin hacen lo que está a su alcance. Se han sumado con sus creaciones artísticas a otros movimientos en Chile, Colombia y Canadá.

Su trabajo se conoce en España, Alemania y Noruega. Saben que la gente tiene cercanía con lo que ellos producen en su estudio. Hacer arte les significa primordialmente dejarse llevar, involucrarse en un proceso de crecimiento y experimentación. Antes de poner manos a la obra platican la idea, la bocetan y ya luego la ejecutan. El caso es que sucede algo muy orgánico. El uso que hacen del color parte de lo intuitivo, nada es prediseñado. La gama cromática que emplean se ve muy influenciada por los ocres, descartan totalmente el blanco, y es que para Omar “ya hay demasiada blanquitud”, prefieren los colores terrosos.

Gran OM y Kloer opinan desde el arte. Un hecho que salta a la vista es que aman y respetan mucho a los protagonistas de los movimientos sociales, a los que otros ignoran o desprecian. Nada extraño resulta entonces que sus carteles ambulantes se exhiban como testimonio de una lucha donde caben muchas otras.

René Chargoy Guajardo

La exposición Un mundo donde quepan muchos mundos. Una lucha donde quepan muchas luchas,  de Gran OM & Co, puede visitarse de manera virtual a través del ​Instagram @CasadelLagoUNAM. Los asistentes al Bosque de Chapultepec la encontrarán montada en las Rejas de Casa del Lago sobre la Milla. Más información en casadellago.unam.mx.