Alfonso Reyes, Edmundo O’Gorman, José Bonifaz Nuño, Artemio del Valle-Arizpe, Salvador Novo, Andrés Henestrosa, Carlos Fuentes, Margit Frenk, entre otros, son algunas de las figuras, todas invaluables para la UNAM, que transitan en el nuevo libro ensayístico Del esplendor de la lengua española, de Gonzalo Celorio, que fue presentado en FIL Guadalajara.
“Sabemos que Gonzalo Celorio además de ser un gran novelista es un estupendo ensayista. Me entusiasma muchísimo un libro como éste. Gonzalo me preguntó si lo leí. Pero cómo, lo he leído dos veces, le dije. Es un libro que no sólo incluye los perfiles y el quehacer de estos veintiún académicos, sino que además tiene una relación muy particular con la UNAM”, dijo Rosa Beltrán, durante la presentación del volumen, que reúne los retratos de académicos y literatos. Asimismo, Beltrán destacó que Del esplendor de la lengua española surge como una coedición entre la editorial Tusquets y Literatura UNAM.
Según explicó Dulce María Zúñiga durante su participación, en este libro Celorio pone especial cuidado al disertar sobre la especificidad de la novela en lengua hispana, además de ahondar en lo que representó el Boom de la literatura hispanoamericana para el género, sobre todo en el ensayo dedicado a Carlos Fuentes:
“Fue capaz de condensar poéticamente varios siglos de épica nacional desde lo prehispánico hasta la lucha revolucionaria y el México postrevolucionario: la afirmación de la Ciudad de México como metrópolis multifacética”, explicó.
Por su parte, Felipe Garrido, habló de la labor de Celorio como docente en la UNAM: “Gonzalo es ante todo un maestro. Uno juzga a un maestro por la veneración que le tienen sus alumnos”, señaló para explicar que esa era la verdadera esencia del escritor de Y retiemble en sus centros la tierra y Tres lindas cubanas, la de alguien que enseña.
En este punto, aludió al ensayo contenido en Del esplendor de la lengua española sobre el catedrático jalisciense José G. Moreno de Alba, quien fuera uno de los grandes maestros de Celorio:
“Qué doloroso poner como subtítulo de estas líneas la frase in memoriam cuando hoy en día aún oigo el timbre exacto de su voz y veo el brillo escéptico e inteligente de su mirada… Cómo tan pronto reducir su imponente y fluida biografía a un currículo académico, a la importancia de su legado, a la continuidad de su sabiduría y de los alumnos que formó. No me bastan ni me consuelan los lugares comunes de la ley de la vida…”, concluyó la cita.
Jorge Luis Tercero