- Luis Eduardo Yee protagoniza este monólogo futurista escrito por José Emilio Hernández, dirigido por David Jiménez Sánchez y producido por Teatro UNAM
- Entre conspiraciones internacionales, una pareja intenta reescribir su historia para salvar el mundo. La puesta en escena plantea la pregunta ¿qué cambiarías si pudieras viajar al pasado?
- Se presenta en el Teatro Santa Catarina, en Coyoacán, del 24 de abril al 8 de junio, con funciones de jueves a domingo
La nueva producción de Teatro UNAM, Nosotros íbamos a cambiar el mundo, es una puesta en escena que fusiona la ciencia ficción, el humor y la nostalgia desde una mirada mexicana. Escrita por José Emilio Hernández, dirigida por David Jiménez Sánchez y protagonizada por Luis Eduardo Yee, este unipersonal de las compañías Los Bocanegra y 8m3, invita a reflexionar sobre el presente a través de una historia de amor y viajes en el tiempo. Estará en temporada del 24 de abril al 8 de junio en el Teatro Santa Catarina, en Coyoacán.
La obra plantea una historia singular: Luis Eduardo y María son seleccionados para viajar en el tiempo y modificar un solo evento del pasado. A través de siete sucesos —una organización gubernamental que aceleró el fin del mundo; la desaparición de María tras una discusión con Luis; la muerte de Jorge Ibargüengoitia en un accidente aéreo; un pato que irrumpió en la cocina de un restaurante oriental; Georgia O’Keeffe pintando Carretera de invierno en 1963; una mujer que apedrea la estatua de Lucian Blaga en Bucarest; y el eco persistente de lo que no pudo evitarse— el relato entrelaza memoria, ficción, historia del arte, desapariciones y catástrofes globales, en un escenario postapocalíptico donde lo personal y lo colectivo se funden en un mismo intento por comprender el presente.
“Le encontramos una nostalgia al viaje en el tiempo y una potencia significativa a intentar resarcir cosas. Había una frase que escuchamos por ahí sobre que escribir sobre el futuro es tener plena conciencia de las problemáticas del presente. Con esa idea comenzamos a trabajar. La obra surgió en 2019 como un monólogo, pero encontró su fuerza narrativa en el contexto pandémico, donde el tiempo se relativizó y se volvió urgente la pregunta: ¿qué haríamos si tuviéramos más tiempo?”, comparte el dramaturgo José Emilio Hernández.
El director David Jiménez Sánchez comenta que uno de los mayores retos fue crear una obra de ciencia ficción —frecuente en el cine y la literatura— pensada desde el lenguaje escénico. “Nos preguntamos cuáles podrían ser los códigos de la luz, del sonido, del espacio, para compartir con el espectador esa atmósfera. Desde un inicio, queríamos hacer un monólogo y experimentar con el diseño para que el público no extrañe otras presencias en escena”.
Parte de la propuesta consiste en reutilizar elementos escenográficos de otras producciones de Teatro UNAM, integrándolos en un nuevo universo narrativo, desde una televisión y un refrigerador antiguos, hasta un tren de juguete y la defensa de un automóvil. La pieza también se destaca por una propuesta sonora arriesgada, compuesta a partir de un catálogo de sonidos e influencias musicales mexicanas como la cumbia, el reguetón o el corrido tumbado, todos tratados para responder a la pregunta: ¿cómo suena la ciencia ficción a la mexicana?
Luis Eduardo Yee, único intérprete en escena cuyo nombre es el mismo de su personaje principal, habita múltiples perspectivas en esta historia, “como si fuera un mismo tren con distintos pasajeros”. Para el actor, la riqueza de la obra radica en la fusión de tres elementos: el humor, el amor entre los personajes y la imaginación desbordante del texto: “Van a ver una historia de amor, de aventura y de conspiraciones internacionales”, afirma.
Sobre la gran pregunta del montaje —¿viajarías al pasado para cambiar algo?—, Luis Eduardo reflexiona: “¿Quién sabe si este mundo tiene solución? ¿Quién sabe si valga la pena arreglar algo de lo ya vivido? Porque eso afectaría inevitablemente lo que se está viviendo ahora”.
Nosotros íbamos a cambiar el mundo, protagonizada por Luis Eduardo Yee, cuenta con el diseño escénico de Fernanda García y el diseño sonoro de Joaquín Martínez Terrón y Emiliano López. La asistencia de producción es de Laura Baneco.
Las funciones van del 24 de abril al 8 de junio en el Teatro Santa Catarina (Jardín Santa Catarina 10, Coyoacán), con horarios los jueves y viernes a las 20 horas, sábados a las 19 horas y domingos a las 18 horas (suspende el 1, 10 y 15 de mayo). El costo del boleto es de $150 pesos (50% de descuento a personas con discapacidad, estudiantes, docentes y exalumnos de la UNAM), los #JuevesPUMA el acceso es de $30 para público en general. La taquilla se abre dos horas antes de cada función. Para más información se puede consultar la página www.teatrounam.com.mx y las redes sociales de @TeatroUNAM.