A los pies de la instalación Xipe Tótec, la muestra 1968: el fuego de las ideas, de Marcelo Brodsky, toma el Centro Cultural Universitario Tlatelolco (CCUT) para recordar movimientos sociales de finales de los 60 y principios de los 70, décadas en las que miles de personas de distintos países salieron a las calles en busca de un mundo mejor.
Se trata de una serie de 41 fotografías, entre ellas 10 originales y 31 amplificaciones, seleccionadas e intervenidas por Brodsky, que se exhibe por primera vez de forma completa. En ellas, se pueden ver imágenes de manifestaciones realizadas a finales de los 60 y principios de los 70, en 35 ciudades de 23 países, como son la Ciudad de México, París, Tokio, Londres, Praga, Río de Janeiro, Pekín, Madrid, Bogotá, Washington, entre otros.
Las intervenciones hechas por el artista argentino se caracterizan por resaltar elementos significativos de las imágenes, a través del color, y por sus anotaciones que conectan con otros movimientos y sucesos del presente, para provocar en el espectador el ejercicio de la memoria y la reflexión sobre sus propias condiciones políticas y sociales.
La serie comienza con una intervención a una fotografía de la marcha en la que participó el rector Javier Barros Sierra, en solidaridad con los estudiantes de la Universidad, el 1º de agosto de 1968. Brodsky relaciona la imagen con uno de los sucesos que más ha marcado al México contemporáneo, el caso Ayotzinapa.
Comparte el artista que el hecho lo afectó en demasía, pues también ha experimentado una ausencia provocada por la violencia de Estado; la muerte de su hermano menor durante la dictadura argentina. En la intervención, se puede leer: “Si se hubiera juzgado Tlatelolco, no se hubiera producido Ayotzinapa”, frase que pensó en conjunto con el artista Felipe Ehrenberg.
Otra intervención que destaca es la que hace referencia a las movilizaciones estudiantiles en Túnez, Líbano y Egipto, realizada sobre una fotografía inédita de estudiantes congregados en la Universidad Americana de Beirut. El artista advierte que casi no hay registros de estos movimientos, por lo que es importante seguir documentando.
Ander Azpiri, subdirector académico del CCUT, comenta que la propuesta museográfica de presentar amplificadas las intervenciones de Brodsky responde al propósito de generar en el público el reconocimiento propio en las imágenes en exhibición, así como la sensación de estar rodeado por una manifestación multinacional.
Kevin Aragón
1968: el fuego de las ideas se exhibe del 25 de octubre al 25 de febrero del 2018, en el Centro Cultural Universitario Tlatelolco. Horarios de visita en www.cultura.unam.mx.